Los despidos ya iniciaron en los bares y discotecas de Guayaquil tras la disminución de clientes y el aumento de los costes operativos, como resultado de los apagones. Como muestra, un trabajador de uno de los locales de la Zona Rosa señaló que de las 7 personas que laboraron hasta agosto, ahora apenas quedan 2.
Guayaquil: la vida nocturna se apaga por la crisis energética; bares y discotecas inician despidos
Los administradores y propietarios de los bares y discotecas de Guayaquil exigen al gobierno ayuda urgente para enfrentar la crisis energética.

Los bares y discotecas de Guayaquil están enfrentando pérdidas del 50% debido a los apagones.
En Urdesa, un dueño de otra discoteca también admitió que varios locales han debido reducir personal en esa zona, ya que la clientela ha disminuido en cerca de un 50% y por el alto costo de los generadores, en declaraciones a El Universo.
Algunas alternativas a las que han recurrido los establecimientos para atraer a más clientes y mitigar la crisis son anunciar por redes sociales que cuentan con estos artefactos y que la atención se lleva a cabo sin problemas hasta la madrugada.
Otra de las soluciones que se está pensando adoptar es abrir más temprano e incluir comida en los menús, como se hizo durante la pandemia.
Sin embargo, varios de estos esfuerzos han sido en vano. En la Zona Rosa, ya desde las 7.00 pm, varios locales lucen casi vacíos. Y la situación no despunta ni desde los días jueves, cuando solía haber mayor concurrencia.
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Disc jockeys de Guayaquil, también afectados
El panorama también está afectando a los disc jockeys, quienes están recibiendo menos contrataciones en los establecimientos nocturnos.
Por el momento, sobrellevan la situación con los eventos privados, explicó a El Universo Johnny Benites, representante de la Asociación de Disc Jockeys del Guayas.
En muchos casos, el servicio incluye la dotación de generadores. Sin embargo, en ese caso, el coste del paquete se eleva en más del 50%.
Por ejemplo, un servicio de cinco horas que se cotiza en US$ 150 podría llegar a US$ 350, por los U$S 200 adicionales del uso de generador. Esto ha ocasionado que la demanda se reduzca en un 30%.
Así, si bien los trabajadores de los establecimientos nocturnos están tratando de manejarse en medio de los apagones, exigen al gobierno que se revisen las franjas horarias, además de emitir medidas para evitar más despidos y el cierre de los negocios.