Quito: Gremios exigen que apagones se den según programación y mayor transparencia sobre crisis energética

Por Claudia Oleas

Los gremios del turismo y del sector productivo de Quito exhortaron al gobierno a cumplir con los horarios de cortes de luz anunciados en los cronogramas. Varios negocios afirman que estos no tienen siempre lugar en las horas programadas, afectando su planificación.

Esto, tras el anuncio del gobierno sobre cortes de luz extendidos a nivel nacional a partir del lunes 23 de septiembre, debido a la grave sequía que está afectando la generación energética en las hidroeléctricas.

Por otro lado, el sector manifestó su preocupación por las pérdidas económicas provocadas por los apagones, pues si bien varios negocios cuentan con plantas generadoras propias, estas solo suelen proporcionar energía por 4 horas.

No obstante, algunos cortes se extienden hasta por 7 horas, explicó a Diario La Hora Mónica Sánchez, vicepresidenta del Buró Centro Histórico de Quito.

Por su parte, Diego Vivero, presidente de la Confederación de Restaurantes de Pichincha, solicitó que el cronograma de cortes se anuncie con mayor anticipación, y no el domingo “a última hora”, como ocurrió en esta ocasión, tomando en cuenta que esto afecta la planificación de los eventos que organizan.

Por otro lado, explicó que la implementación del teletrabajo también ha perjudicado al sector restaurantero, ya que esto conlleva a que haya una menor afluencia de clientes a los establecimientos.

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Gremios productivos exigen conocer realidad de crisis energética

De su lado, María Paz Jervis, presidenta de la Cámara de Industrias y Producción (CIP), a través de un video publicado en las redes sociales, rechazó "la falta de información y las contradicciones del gobierno" en el marco de la crisis energética que atraviesa el país.

Según la dirigente gremial, los cortes generan pérdidas para la industria de alrededor de US$ 25 millones por día.

Además, afirmó que la legislación vigente en la Constitución, ratificada por la actual Asamblea Nacional, impide que entidades privadas apoyen en la generación eléctrica y, además, restringe la autogeneración, lo que ha agravado la situación.

Por esta razón, exigió un mayor diálogo por parte del gobierno con el sector productivo, para “tomar decisiones oportunas con información transparente” y poder "conocer la dimensión real de esta crisis”.