Las aerolíneas se revelan contra el aeropuerto de Heathrow: un grupo de compañías, liderado por IAG, matriz de Iberia, British Airways y Vueling, ha lanzado una dura crítica contra el aeropuerto británico, al que acusan de ser el más caro del mundo y de aplicar tarifas aeroportuarias que perjudican la competitividad del sector.
IAG pide a Heathrow revisar tarifas ante la futura ampliación del aeropuerto
Aerolíneas como Iberia o British Airways (IAG) piden a Heathrow “contención” en la subida de tasas: el aeropuerto británico es ya el más caro del mundo.
Luis Gallego, CEO de IAG.
En una reunión con el Gobierno británico, las compañías han solicitado una revisión de los costes operativos del aeropuerto, argumentando que su estructura tarifaria encarece innecesariamente los billetes para los pasajeros.
Costes elevados y falta de competitividad, según IAG
Según los datos presentados por las aerolíneas, las tasas aeroportuarias de Heathrow superan con creces las de otros aeropuertos internacionales comparables, lo que impacta directamente en el precio final de los vuelos. Esta situación, denuncian, dificulta la competitividad de las aerolíneas británicas frente a otras operadoras que pueden ofrecer tarifas más competitivas desde aeropuertos con costes más ajustados.
Uno de los principales motivos de preocupación es la construcción de una tercera pista en Heathrow, un proyecto que supone una inversión estimada entre 45.000 y 63.000 millones de libras. Las compañías temen que el elevado coste de esta ampliación agrave aún más la situación y se traduzca en un nuevo aumento de las tasas, impactando tanto en las aerolíneas como en los pasajeros.
La calidad del servicio del aeropuerto de Heathrow, en entredicho
Las aerolíneas han subrayado que los altos costes del aeropuerto no se reflejan en la experiencia del pasajero. A pesar de sus tarifas premium, Heathrow ha recibido puntuaciones bajas en encuestas de satisfacción, lo que refuerza la percepción de que los servicios prestados no justifican el precio que los operadores deben pagar para operar en sus instalaciones.
¿Debería intervenir el Gobierno del Reino Unido?
Ante este escenario, las aerolíneas han pedido al Gobierno británico que intervenga y revise el sistema de regulación de Heathrow, con el objetivo de garantizar una estructura de tarifas más justa y transparente. Buscan que las tasas aeroportuarias reflejen de manera proporcional los costes reales de operación y no generen un impacto desmedido en los precios de los billetes. Algo que, por el momento, ha contado con una respuesta escueta del Gobierno del Reino Unido.
La ministra de Hacienda británica, Rachel Reeves, ha manifestado su respaldo a la ampliación del aeropuerto, aunque ha reconocido que es "fundamental asegurar que los costes sean razonables". Ahora, el Gobierno deberá analizar cómo equilibrar los intereses de pasajeros, aerolíneas y el desarrollo de las infraestructuras aeroportuarias en un contexto de presión creciente sobre Heathrow.
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